Logo maquina-liquen SOLO linea verde

reforma

2018-19 Villanueva del Conde | Salamanca

casa Rita

Fotografías: Óscar Guerra, máquina-liquen y bOrrOsOgráfico

Casa Rita es una casa tradicional de los pueblos de la sierra de Francia, una edificación de tres plantas emparedada entre las construcciones vecinas, con fachada estrecha y mayor profundidad. Atendiendo a nuevas necesidades habitacionales, ha sido transformada a lo largo de los años. La última y profunda reforma a la que se ha visto sometida se realizó a lo largo de 2018 de la mano del estudio de arquitectura máquina-liquen.

Y como la arquitectura es hija de su entorno y con él debe crecer, la tarea tenía que afrontarse desde el deseo de preservar la esencia de las personas que en algún momento habitaron la casa, respetando en algunas partes la construcción previa. Aquí es donde se orquestó el encuentro entre los materiales encontrados durante la demolición parcial con las últimas tendencias arquitectónicas, conjugando nuevos materiales con aquellos rescatados (en su mayoría madera y piedra) que dejaban constancia de los valores y el pasado de una familia.

El estudio preliminar del edificio demandaba la necesidad de llevar luz natural a todas las estancias de la vivienda, especialmente a la planta inferior que antes había estado ocupada por la bodega subterránea, en la parte posterior de la vivienda, y un portal en su cara sur, la fachada principal de la casa de escasos tres metros de anchura. De la bodega se rescataron numerosos utensilios tradicionales para ser parte de la decoración del nuevo entorno. 

La solución tomada fue la colocación de una escalera central de porte muy ligero que conecta las tres alturas y se convierte en un pozo de luz por el que se derrama el sol desde las claraboyas situadas en la cubierta. Alrededor de ella se distribuyen todas las estancias mediante corredores volados en cada una de las dos plantas superiores, convirtiendo la vivienda en una suerte de patio de vecinos interior. Para dotar de luz natural a las habitaciones más oscuras se utilizó policarbonato traslúcido en el cerramiento de algunos de los muros internos. Ahora la escalera no es solo lugar de paso, es protagonista y centro de la vida del hogar, es patio, es torre y escenario de conversaciones.

Las plantas inferior y superior conforman cada una de ellas un apartamento completo, con todas sus necesidades cubiertas (salón-cocina, habitación y baño); quedando el nivel intermedio ocupado por dos dormitorios y un tercer aseo. Para reforzar la idea de corrala y lugar de encuentro, en el pasillo de esta planta central se ha instalado el lavabo, una pila de piedra como las que se pueden encontrar en muchos patios de las antiguas casas castellanas. La cocina totalmente equipada del piso a pie de calle se sitúa como un mural aprovechando el hueco de la escalera, que se apoya sobre ella. 

El proyecto de reforma se completa con la remodelación de un huerto en la parte posterior del inmueble al que se accede desde sendas entradas en las dos plantas superiores, y un edificio anexo, un pajar contenedor del pasado y el oficio familiar reconvertido en lugar de encuentro para gratas reuniones.